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A su partída hubieron mucho de agradecer nuestros misio– neros, el retrato y aut6g~afo y letras de felicitaci6n y aliento de su Cat6lica Majestad Alfonso XIII, a quien Dios guarde muchos años. El entus;asmo y espfr;tu de sacrificio, de que van animados los m;sioneros, nos hace ser optimistas y augurar que en no leja– no día llegarán a constituir los Capuchinos españoles un Vica– riato independiente en China . Bl teatro de acción de nuestros '.JV\.isioneros Mide el territorio del Kansu Ü::iental, una extensi6n de 88.ooo Klms". divididos en doce distritos: con más de 6.000.000 de habitantes, que profesan la relig;6n de Buda, Confucio y Mahoma: s6lo 5.907 son en la actualidad cat6licos; excelente si– tuaci6n topográfica, y fértil suelo del país; clima no malo, pues aunque está situado en los paralelos del Africa del Norte y es zona tan cálida, goza de una elevaci6n de cerca de 1.500 met. sobre el nivel del mar. No quiere con esto decirse, que no tengan que superar nue.s– ' tros misioneros no escasas diiicultades; la misma extensi6n del te1ri torio: ·los casi seis millones de paganos por convertir, tan re– fractarios algunos, como los mahometanos; el odio de los chinos a los euro'peos, el temor y 13. persecuci6n de funcionarios y lite– ratos, host;les por lo general al catolicismo, y más que todo, el desmesurado apego aun de la poblaci6n rural a las cosas mezqui– nas de la tierra y su menguada comprensi6n de las verdades tras_: cendentales de nuestra Santa Religi6n, causas son todas ellas que retardan no poco la conversi6n de estas pobres gentes, al cuida– do y solic;tud de nuestros misioneros Capuchinos encomendadas. 6sta.do actual de la '.7"\isión. No hace 7 años todavía qu.e están los Misioneros Capuchi– nos alemanes en .el Kansu O 'r., y tan s61o llevan dos años y me– dio los Capuchinos españoles de esta nuestra Provincia de Na– varra-Cantabria y ya han visto bendecidos por Dios sus esfuer– zos y sacrificios, como se echa de ver por la reciente estadística publicada a fines del año 1928. Cuenta la Misi6n con 29 Padres, de ellos 8 españoles, 5 de Norte-América, los restantes alemanes; con dos hermanos legos, y dos sacerdotes indígenas, distribuidos en 20 estaciones princi– pales y 46 secundarias: 7 Religiosas de Steyl atienden a la es- 163