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EL PROBLEMA DE LA RENOVACION DEL APOSTOLADO... 21 lidad específica de la misión, no deben faltar en las predicaciones ¡nisionales y en los cultos de la misión este enfoque hacia una liturgia más consciente y activa y hacia una vida cristiana con más sentido de comunidad. A nuestro pueblo les queda largo camino que recorrer, para llegar a la meta de los em– peños actuales de la Iglesia, y cuanto hagamos en este sentido será una ayuda eficaz a la pastoral ordinaria y un mérito positivo de las misiones. IV. SINTESIS MISIONAL Y CENTRO DE VISION Nos queda por estudiar la cuestión práctica: la forma concreta de pro– gramar las misiones sin perder de vista todos los aspectos tradicionales y modernos que según hemos dicho parece deben integrarlas hoy. No podemos soslayar este problema práctico sin quedar a mitad de camino. ¿Cómo rea– lizar la síntesis de lo antiguo y lo moderno, cómo insertar en el fondo doc– trinal de la misión clásica nuevos elementos, que no son precisamente nue– vos temas de predicación, sino aspectos nuevos que llevan consigo cambios de perspectiva y aun parecen exigir un centro de visión distinto del que en la misión tradicional servía para concentrar toda la predicación en torno a una idea central dominante? Las misiones se han caracterizado siempre y han estado dominadas por una mentalidad de síntesis, y aquí ha estribado precisamente su fuerza. Al– guien llamó a las misiones "técnica de ruptura de frentes", maravillosamente montada, donde todo está bien trabado y ordenado en dirección a un ob– jetivo único. La síntesis de la misión clásica se encuentra ni más ni menos que en el principio y fundamento de los ejercicios ignacianos : "El hombre es creado para... servir a Dios y mediante eso salvar el alma". Centro de visión, punto de referencia de toda la actividad misionera: la salvación eter– na. Hoy en los planes de reforma totalitaria de las misiones, se pretende darles un enfoque distinto y del todo nuevo, agrupando la síntesis misione– ra en torno a ideas como éstas : El reino de Dios de los sinópticos. La vida en Cristo de San Pablo. El Agape divino en S. Pablo y S. Juan. La gracia cristiana en todo el nuevo testamento. La Encarnación redentora. La recapitulación universal en Cristo. El misterio pascual.. . La extrañeza que nos causa la sola enumeración de estas ideas como te– mas centrales de misión (ideas por lo demás muy bíblicas y teológicamente profundas, y que compendian maravillosa doctrina) nos dice que no estamos preparados para realizar con ellas la síntesis de la misión y que además estamos convencidos de que el pueblo cristiano lo está mucho menos para captar el mensaje de salvación a través de esos prismas a los que está ~an poco acostumbrado. Mientras la teología no nos dé realizadas esas síntesis doctrinales, di-

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