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566 ALEJANDRO DE VILLALMONTE, OFMCAP entusiasmo religioso: tiene su raíz en la 'ontología' del Ser divino, concebido por Escoto como formalmente como " Dios- Caridad", Amor de liberalidad. Más lejanas podrían parecer las aplicaciones que el mencionado axioma tiene en el campo de la antropología teológica. El tema es susceptible de un amplio comentario. Nos ceñimos a mostrar dónde está el núcleo del problema. Me refiero al tema secularmente polémico entre protestantes y católicos, en referencia a la posible co-laboración, ca-operación humana en el proceso de la justificación y salvación. Modernamente a tal hecho es le designa con el término "sinergismo". Es conocido que la teología protestante rechaza todo 'sinergismo" entre Dios y la criatura en al proceso de la salvación. La 'energía' divina es tan infinitamente distante de la criatura, que no puede rebajarse a colaborar con la 'energía' del hombre, infinitamente miserable . Sería, por parte de Dios, un despojarse de su gloria, de su mismidad de Dios para concederle su 'Gloria' a la criatura. Aquí ocurre la figura teológica que en alemán llaman "Alleinwirksamkeit": acción/actividad exclusiva" de Dios en la obra de la salvación. De ella habla la teología reformada al referirse al acontecimiento de la justificación: Dios lo obra todo en nosotros sin nosotros" (in nobis sine nobis). Se refleja aquí un concepto de Dios como ser infinito infinitamente alejado del hombre: el ser finito es absolutamente incapaz del Infinito. La relación entre el ser finito y el Infinito es dialéctica, de oposición. El Infinito no puede hacer a otro partícipe de su Gloria sin perder su dignidad, su mismidad de Dios. Utilizando la terminología de Escoto diríamos que este Dios de los protestantes es un Dios avaro, celoso, envidioso del Bien infinito de su esencia. No quiere que tal Bien lo goce otro distinto de Dios mismo. Por el contrario, Escoto, con su idea de Dios Caridad, de Amor liberal afirma que la máxima perfección del Ser divino consiste en su poder de autocomunicación, de autodonación. En que quiere y puede hacer que otros tengan en sí la capacidad de amar al Bien infinito, la esencia divina, junto con él: vult habere alias condiligentes se. Tanto en la vida íntima de Dios, como en relación a las criaturas. Dejando la discusión en su propio tamaño lo que aquí importan subrayar es el concepto de Dios tan diverso que subyace en un teólogo en un teólogo reformado, como K. Barth y el teólogo católico J. Duns Escoto 32 . 32 El teólogo reformado A. LACOQUE tiene esta frase que recuerda textos citados de Escoto: "De hecho, hay creación porque Dios ama a otro. O quizás deberíamos decir porque Dios se ama a sí mismo en otros". A. LACOQUE-P. R.!COEUR, Pensar la Biblia. Estudios exegéticos y hermenéuticos, Barcelona 2001, 31.

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