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EL CONSEJO DE INDIAS Y LAS MISIONES CAPUCHINAS 291 El contenido de la mencionada cédula fue comunicado por el gobernador de Cumaná, D. Pedro de Brizuela, al P. Magallón el 10 de noviembre de 1652, y sin pérdida de tiempo se embarcó éste con su compañero el P. Antonio de Monegrillo rumbo a España 33 • A me– diados de septiembre de 1653 se encontraban ya en la corte. Desde esa fecha hasta fines de octubre de 1662 se entabló una verdadera lucha en torno a la misión de los capuchinos al oriente venezolano, en la que tomarán parte el P. Magallón, apoyado y favorecido por el nuncio, junto con otros religiosos, y del otro bando, los irreduc– tibles consejeros de Indias, el comisario general de Indias de los franciscanos y otras personas interesadas. En efecto : poco después de su llegada a Madrid el P. Magallón presentó el primer memorial al Consejo. En él exponía lo sucedido, la entrada a los indios cumanagotos, los frutos alcanzados, etc., y cómo habían obedecido puntualmente la orden del rey de regresar a España, pero terminaba pidiendo autorización para continuar aquella misión. Examinada la cuestión el 25 de septiembre de 1653, siguió la misma división de pareceres, tres contra tres; el rey de nuevo se puso en contra de los capuchinos mandando se quedasen en España 34 • El P. Magallón no se dio por vencido; siguió trabajando por medio del nuncio y buscando recomendaciones. Además, fueron llegando al rey cartas de Cumaná y Nueva Barcelona, en las que se ponderaba sobremanera lo realizado por los capuchinos, su celo, su vida ejem– plar35. Lo cierto es que el 28 de marzo de 1654 el rey expedía una nueva cédula por la que autorizaba al P. Magallón a volver de nuevo a la misión junto con el P. Antonio de Monegrillo y cuatro compa– ñeros más 36 • Cuando ya todas las cosas estaban en marcha y los misioneros se encontraban en Madrid, dispuestos a emprender el viaje a Cádiz, el comisario general de Indias, P. Alonso del Prado, presentó intempestivamente un memorial en contra de aquella misión de capuchinos. Sobre todo exigía se diese a los religiosos de su Orden aquella misión por tener conventos en Cumaná y Nueva Bar– celona, alegando asimismo otras razones : que podría haber disensio– nes entre unos y otros religiosos : que estaba prohibido hacer nuevas fundaciones en Indias, etc. Ni que decir tiene que el influyente de Cu,nan(¡ (1678), en FR. DE RIONEGRO, Relaciones de las Misiones de los PP. Capuchinos I, Sevilla 1918, 84. 33 Carta de Brizuela al rey (Cumaná, 11 noviembre 1652) (AGI, Santo Domingo, 641). 34 Memorial del P. Magallón y Consejo de Indias (25 septiembre 1653) (ibid.). :i5 Cartas de Brizuela (Cumaná, 11 noviembre 1652) y del Cabildo de Nueva Barcelona (3 y 6 diciembre 1652) (ibid.). 36 Carta del P. Magallón a Propaganda Fide (4 abril 1654) (Arch.Prop.Fide, SA, vol. 260, f.34).