BCCCAP00000000000000000000677

* La disminución del personal nos obliga, tal vez providencialmente, a reconside– rar nuestras presencias y nuestros com– promisos misioneros. El hermano misio– nero debe dedicarse a su trabajo espe– cífico, dejando las demás funciones y tareas a los laicos, a las comunidades cristianas y a otros colaboradores. 2. PROGRAMA DE SENSIBILIZACION YFORMACION 35. Para responder adecuadamente y con elementos cada vez más válidos a este gran em– peño apostólico de la Orden, es necesario pro– gramar un servicio permanente de sensibiliza– ción y formación misionera de nuestros her– manos. Sensibilización La idea de la misión debe informar la vida, el trabajo y la oración de nuestras Provincias. Si una Provincia no tuviese espíritu misionero, estaría llamada a languidecer y a desaparecer. Este espíritu misionero se debe manifestar, ante todo, en el hecho de estimar los compro– misos misioneros entre los principales deberes apostólicos de la Provincia. Superada la idea de "nuestras misiones" y de la "misión-territorio", es importante que to– dos traten de asimilar y profundizar las nuevas perspectivas misioneras en el espíritu de comu– nión y de servicio a las· iglesias particulares. Mediante un adecuado análisis de la dimen– sión misionera de la nueva eclesiología, hágase - 43 -

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz