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Los tres ejercicios cuaresmales: el ayuno, la oración y la limosna El ayuno, oblación de amor y ascesis El ayuno tiene dos valores y a ello corresponden dos motivaciones. Tiene un valor espiritual o místico, y un valor elemental, que se diría rutinario, y que es del todo sano y comprensible: es su valor ascético. Son dos enfoques. Existe un ayuno espiritual o místico. Ojalá fuera ése el ayuno de nuestro Viernes Santo. Ha muerto el Señor y la Iglesia está de llanto y luto. Hamuerto el esposo y la esposa no tiene ganas de ningúndeleite corporal. Porque así sucede en la experiencia sensitiva del amor humano. Muere el marido y la mujer se queda sin ganas de comer. Esa biología del cuerpo es la biología del amor. ¿Para qué ayunar? ¡Quién pudiera responder: Para nada! Esto es ayunar por amor; esto es la aflicción gratuita que los amantes de todos los siglos han comprendido sin explicaciones. Del Viernes Santo y del Sábado Santo dice el Misal: «Según una antiquísima tradición, la Iglesia no celebra laEucaristía ni en este día ni en el siguiente». Privados del cuerpo del Señor, es comprensible que nos veamos privados de los alimentos de la mesa. 51
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