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324 GERMÁN ZAMORA de Locke: según el portugués, todas nuestras ideasseoriginanode los sentidos o de la meditación (o.e. 47), es decir, de la experiencia ex– terna o de la interna. Siguiéndole, y con él a Locke, Villalpando sen– tenciaba: «Facultas itaque sensitiva, et reflexiva in homine sunt prin– cipia agentia, seu activa idearum.» 9 División de las ideas: procede de Genovesi (o.e. 85-94), coincidiendo con él, especialmente, en las definiciones de cada clase de ideas y en los ejemplos que propone. Los universales (I 144-146): toma de esa misma fuente tanto el concepto de «universal» (o.e. 90-92), como la descripción de las ideas singulares: Genovesi (o.e. 90 nota) «Omnes ideae sensuum sunt sin– gulares, quia res exhibent cum suis circunstantiis individuanti– bus.» Villalpando (I 142 nota 2) «Omnes ideae sensuum sunt sin– gulares, quia res exhibent cum suis circunstantiis, seu prout sunt in se.;, El enlace con Locke lo evidencia su cita por Genovesi, para definir las ideas reales y las quiméricas, nociones que Villalpando reproduce con su acostumbrada brevedad en estos casos (I 144). Los predicamentos y grados metafísicos: depende del Arte de pen– sar (I parte cap. II 46-54), a quien sigue Villalpando muy de cerca. Aparte de esos temas, éste presenta otros muchos, algunos bastan– te insólitos en la criteriología escolástica: Reglas y peligros del pensar: sigue de lejos a Genovesi (o.e. 92 94-100). En su visión negativa de los sistemas filosóficos en cuanto tales se remite a Condillac, elogiando su «eggregius tractatus» Des Systemes; y, a Wolff, en lo qua a aquéllos concede de positivo, re– comendando igualmente su obra en ese punto. 10 División de las ciencias según el objeto de las ideas: Compendia premiosamente largos capítulos des Genovesi, cuyo contenido suele 9. (I 136s). Genovesi, que incluía en la misma opinión del «nihil in intellectu quin prius fuerit in sensu» a Lucrecio (efluvios sensibles), escolásticos (especies impresas espiritua– lizadas) y a Locke («Lockius ipsas motiones sensuum et cerebri esse perceptiones et ideas») y enumeraba seis teorías ideogenéticas más, sin hallar plena satisfacción en ninguna, se incli– naba provisionalmente también por la descrita: «Interim ne ullum bine praejudicium pro inquirenda veritate nascatur, putabimus verum, etiamsi forte non sit, orones ideas nostras partim sensationi, partim et meditationi originem debere» (Elementorum artis logico-criticae 84). Jacquier compartía la teoría (a. c. I 57). La nota de Villalpando (I 135s) y Jacquier (a. c. 48-50) coinciden por provenir, probablemente, de la misma fuente. Aquél vuelve sobre el asunto en I 380 nota, con un pasaje tomado a la letra de Vernei (a. c. 122). 10. Escribe de Wolff: «Videri debet locus integer, part. l. cap. 3 de Virtutibus intellect. § 286. sed et § 313. ídem repetti, atque inculcat; qui etiam consulatur» (I 154 nota).

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