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MELCllOR DE POllLADURA IIasta el día de hoy había estudiado en toda su amplitud el proble– ma de la vinculación de los Capuchinos españoles al centro propulsor de la Orden después de haberse desvinculado en 18(}1 en virtud del régimen de alternativa. Pero en las relaciones más o menos fragmenta– rias que se han publicado, se atribuye por lo general al P. José Cala– sauz la gloria casi exclusiva de haber logrado aquel noble intento. Cree– mos que el primero que enunció esta idea fué el P. Eduardo de Alen– c_,:on en la noticia necrológica del Em.mo Card. Vi\'es y Tutó aparecida a raíz de su muerte: Novus Híspaniae Provincialis (P. Joachim) sum– summoperc cupiebat eum (Josephum Calasanctium) Romae permanc– re, ut facilius unionem, cuius praecipuus fuerat artijcx, consiliis adiu– varct et opere confirmarct 11 ". Y haciéndose eco de esta categórica afir– mación, escribía el biógrafo del Emrno. Purpurado: ·· Después de ha– ber seguido el proceso de la unión, teniendo a la vista los innumerables documentos que se conservan en el archivo generalicio de la Orden..., podemos asegurar que la mano más segura que lo condujo desde el prin– cipio al fin, fué la del P. Calasanz. Esta obra, que tanto influjo ha te– nido y ha sido la fuente de todo el progreso subsiguiente, es toda del P. Calasanz" 117 • Atmque conocedor de las dos fuentes indicadas, po– demos afirmar que es independiente y autónomo el testimonio del P. Luis de Masamagrell, .Mons. Amigó y Ferrer, que se lee en su autobio– grafía: "Al ser nombrado para este cargo (de Comisario Apostólico) el Rmo. P. Joaquín <le Llavaneras, por decreto de la S. C. de Obispos y Regulares. en 8 (B) de marzo de 1881, ya se tu\'o en cuenta que éste, influido por su hemiano el P. Calasanz de Llavaneras. guardián enton– ces y director ele la Escuela Seráfica de Igualada, facilitaría la supre– sión del dicho cargo, estrechando la unión de los Capuchinos españo– les con la cabeza de toda la Orden, corno así sucedió.. 11 ú. El mismo pa– recer refleja el autor anónimo de la necrología del P. Joaquín, que st; expresa en los siguientes té1minos: ·'Sed in quo maximam meretur lau– dem, est in perducendo ad debitum ar fortunatum f ine1n imíonem... Ad quod quidem opus imionis perficiendum, maximurn auxilium eidem contulit s-uis consiliís, suasíonibus et 'incitamentis ciusdem germanus frater futurus Cardinalís Vices y Tutó, qui ex quo Ordinem fuit ingres- 116. Cf. «Analecta o. F. M. Cap.» 30 (1914) 26. 117. Cf. ANTONIO M. DE BARCELONA, ob. cit., 127. El P. Gumersindo de Elite– lla (ob. cit., 475) se sorprende ante afirmaciones tan categóricas, pues opina, como hemo¡¡ yj.sto, que lo má;, dificil y lo más árduo habla sido obra del P. Adoain. lll. Ot. A11!obtograJú;¡ cit., '10.,