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262 FR. MANUEL DÍ.\Z III Conferencia Interamericana de Agricultura un trabajo con el epígrafe «Labor de los Padres Capuchinos en la Misión del Caroní (Venezuela)». Analiza magistralmente el medio del Vicariato, el índice de la vida económica, social, agrícola y religiosa de los indios a la llegada de los misioneros, y la situación de los mismos una vez establecidos allí. Relata también las relaciones comerciales del elemento indígena con el criollo y los medios económicos con que cuentan los misioneros para promover la cultura de estos indígenas. El folleto incluye una serie de fotografías, a título de ilustración. Acerca de los motilones bravos, pacificados por los misioneros del Vi– cariato de Machiques (Estado Zulia), donde se halla enclavado el hábitat de los mismos, escribió el P. Annellada una serie de artículos en lo cono– cida revista «Venezuela Misionera" por los años cincucn1a y tres y cincuenta y cuatro. Todos ellps, profusame;1te ilustr::1dos, fueron posteriormente re– copilados en un folleto con el tíiulo de ((Los motilones, raza indómita desde el siglo xv al xx". Es una historia del pueblo motilón, siempre reacio al contacto con el mundo civilizado hasta el año 1960. El folleto hace es– pecial mención de la campaña «Pro Pacificación de los Motilones", orga– nizada por el mismo antor el año 1949, el lema «Dádivas quebrantan peñas)) 22 • El P. Antonio de Aicúcer, valenciano, desde hace años mi- sionero en Colombia, autor de varias obras históricas, publicó en 1962 un libro 23 sobre «El indio motilón y su historia". Estudia, con afán de acu– cioso historiador, la naturaleza, vida y costumbres de estos indios, la his– toria antigua y la reciente, desmintiendo algunas aserciones de otros his– toriadores. Sobre esta misma tribu se escribieron innumerables artículos en toda la prensa y pacífico tomado con julio del año sesenta. en « Venezuela Misionera» a raíz del contacto ellos por los misioneros capuchinos de Castilla en El P. Buenaventura de Carrocera, especialmente dedicados desde hace algunos años a investigar la gesta misionera de los capuchinos castellanos en Venezuela, ha publicado numerosos artículos en «Missionalia Hispani– ca» a dos de los cuales vamos a hacer referencia aquí 24 • Uno de ellos versa sobre el origen y fecha de fundación de la ciudad de Maturín, fundada por los misioneros capuchinos de Cumaná el año 17ó0. Brevemente el P. Carrocera responde en este trabajo a las siguientes preguntas: «¿Se 22. ARMELL\DA, C. de. Los Motilones, raza indómita.,. (Carneas, 1954), pp. 88. 23. ALC.\CER, Antonio de, El indio motilún y su historia, ed. Paz y Bien (Bog0tá. 1962). PP. 286. el p. Alcácer es un sacerdote capuchino de la Provincia de Vakncia (España), que lleva varios años de misionero en Colombia. En la frontera colornbiarn lindante con Veneü zuela existen tarr1bi(,n tribus rnotilonns, e\'zmgelizadas por los capuchinos -valencianos. El P. Antonio en este estudio analiz:i la impor1:i.ncia que los capuchinos Yalencianos tuvieron en tiempos pasados en la civilización de esta. tribu rr1otilona de Venezuela, al mismo tien1po que orienta a sus cohermanos actuales p;:ira. la arLpida e-i:cmgelización de las tribus indígenas motilonas de la parte colombiana. 24. CARROCERA, B. de, Las Misiones capuchinas de Cummuí. sep. de "Missionalía His– pánica", año XVII. 1960, pp. 86.