BCCCAP00000000000000000000639

de mi alma, para a:r:repentirme, y, Heno de contrición y hu– mildad, volver como hijo pródigo a la casa paterna para recibir el ósculo del Padre misericordioso. J. ¿Cuáles sdn nuestras deudas? II. ¿Quién es nuestro Fiador? III. ,:Baio qué condiciones se perdonan las deudas? IV. ¿En qué si.lua'Ción se encuentran los n/J. católicos? I. ¿ CUALES SON NUESTRAS DEUDAS?. En sentido moral los pecados son deudas contraídas con Dios Nuestro Señor. Dios es el acreedor y nosotros somos los deudores. Considera, pues, como eres deudor por tus pecados. 1. º Los pecados son deudas por la ofensa. - Dios crió al hombre para su gloria (20), le conserva para su gloria. Le dió cuanto tiene para que le conociese, amase y sirvie– se. Pecando le niega esa gloria debida. El hombre está obligado a amar a Dios con todo su corazón, con toda su alma, con toda su mente, con todas sus fuerzas. Pecando gravemente no puede decir que le ama en realidad. Le priva a Dios de esa gloria que le debe. 2.º Los pecados s.on deudas por: el daño. - El pecador es un injusto damnificadór. El pecado de Adán arruinó a toda la naturaleza humana y sufrimos las terribles consecuencias. Lós pecados personales causan daño a la persona mis– ma que los comete ; porque le quitan la gracia santifican– te, el tesoro más .rico que posee en el orden sobrenatural. Mientras persevere en \;)Se estado, le impiden ganar mé– ritos para la eternidad. Y si muere en pecado mortal, pier– de el paraíso. Además de esas terribles consecuencias, si– guen también otros males temporales y eternos, para sí (20) fa,, XL!Il, 7,

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz