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AYUDAf>ME,-,.-COOPERACIIÓN MISIONERA 101 dinero se ayuda a enviar las almas al paraíso. Para so– correr las ingentes necesidades de las misiones y misio– neros son necesarias las ayudas de los fieles, ya sea por medio de la moneda, ya por la oferta de muchas cosas materiales que pueden servir en el campo misional. Benedicto XV decía : "Para sostener las misiones se requieren no pocos medios materiales. Llamamos, pues, a la puerta de todos los buenos, a fin de que, en los lí– mites de sus fuerzas, provean con largueza" (8). Y Pío XI · no dudaba, desde las alturas de la Sede de Pedro, al ex– tender la mano suplicante a todos, pidiendo ayuda, so,– corro y contribución (9). Pedir por las misiones es ha– cerse mendigo por Cristo. Las limosnas pueden ser es– pontáneas, sin tiempo ni límites determinados. Pueden . hacerse por mecHo de las· Obras Misioneras Pontificias o por otras Obras particulares, de las cuales trataremos más adelante. Lo que importa es dar generosamente nuestro óbolo para ayudar a extender el reino de Dios· por todo el mundo. (8) Maximum Ilud, AAS.. 1919, XI, pág. 453. (9) Rerum Eccl., AAS., 1926, XVIII,. pág. 72.