BCCCAP00000000000000000000636

veces sin distinci.ón de .las que son debidas a las contingencias de las que le son esen– ciales, siendo de institución divina" (La lgle– cia en la crisis actual, p. 6). Más concretamente: "Un grillo maniobra en ciertos espíritus, para ensombrecer todo lo que la Iglesia ha. hecho, a lo largo de los siglos, en frutos de humanidad: la fecundi– dad de sus invenciones siempre renovadas de la caridad, que ella saca del evangelio y que ella mantiene en el alma de sus niños. En los escritos donde lo arbitrario sobrepasa el de los trabajos denunciados, y con razón, como deformados por miras apologéticas, su historia es odiosamente tergiversada. ¡Es tan fácil, por otra parte, el encon.trar de qué mo– farse o indignarse en la multitud indefinida de los hechos y en la consideración de la miseria humana! Su Tradición, no reconoci– da, no es ya soportada sino como un peso; cuando en realidad es, ante todo, una fuerza viviente, actualizante; se le asimila, porque no se hace el esfuerzo de insertarse en ella, a los desperdicios de un pasado ya muerto. Asimismo la autoridad de la Iglesia no es ya considerada sino como una potencia exterior, más aún, enemiga, cuyo ejercicio es siempre considerado como tiránico. Su magisterio no es soportado sino con impaciencia; sus de– claraciones son juzgadas como abusivas, ás– peramente discutidas, y más aún, enteramen– te rechazadas. No se tiene miedo de agitar la opinión contra él: Parece que se haya per– dido a veces toda idea de la naturaleza y de las exigencias de la libertad cristiana. Y ad– miro la buena conciencia de tantos hijos de la Iglesia, quienes, sin haber realizado !1Unca nada grandioso, sin haber pensado ni sufrido, sin haberse preocupado nunca de reflexionar, -62-

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz