BCCCAP00000000000000000000636

gunas muestras. Dejadas eri paz -tam.bién hay que anotarlo- por la voraz civilización únicamente porque se ve impotente para dar– las la dentellada. Sitios éstos donde por el momento los elementos naturales llevan to– das las de ganar. Pueblecitos como Curiapo, Guayo y Araguaimujo -vanguardias de las misiones capuchinas- dan fe de lo dicho. Lo restante del Orinoco ha pasado a tener historia. Una historia -eso sí- monótona y- no muy brillante, hecha por Compañías Petroleras y por los divertidos juegos de los diversos partidos políticos, empeñados en ganarse la consider~ción pública para los comicios venideros. Esta es la impresión que - ha dejado en mí -residente de unos días- _ la actual capital del Delta Amacuro y fuerte de nuestras misiones en esta región: Tucu– pita. Una tierra medianamente sobada toda– vía por la técnica, causa de que haya perdido su encanto primero y de que no haya adqui– rido el color de un verdadero centro indus– trial. Es el caso aquel de la sirvienta que todo se le iba en soñar con ser señora. ("Venezuela Misionera", 1971 ).

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz