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¡Lo .cual es una palabra de enhorabuena y gratulación para los componentes del Se– cretario Catequístico! Como es una señal de amistad dar cuenta de algunos puntos difíciles, que los maestros han advertido en las comentadas .guías de catequesis. · Dicen, por ejemplo, que en el apartado "recursos" se ha dado excesiva prevalencia a medios de comprensión, que están fuera del alcance de sus ahorros personales. Aña– diríamos por nuestra cuenta que también son prohibitivos para cualquier cura de pueblo. En otras palabras. Que en ese aspecto da la impresión de que se ha tomado como· mode– lo un colegio privado de ciudad. Dicen que los niños no aprovechan lo que era de esperar de un programa así, por cuanto carecen de su correspondiente libro. El tal libro del alumno -aclaran-'- debería ser una síntesis muy breve y clara del pro– grama del maestro, pero -eso sí- dando prevalencia esta vez a los "contenidos" so– bre los "objetivos". ¡Están convencidos esos maestros delta– nos del valor y la necesidad de la memori– zación de fórmulas! Bien está la creación de actitudes de fe en el niño, la finalidad principal y más urgente contemplada en los programas para la edu– cación de la fe. Es lo primero, por cuanto esto es la vida cristiana.· Mas no está nada mal también crear en el niño un "poso intelectual", capaz de darle luz y seriedad. , ("La Religión", 1973).