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CAPÍTULO III ORGA.SIZACION DEL EJERCITO MISIONERO En consecuencia de lo arriba dicho, a todos los ope– rarios evangélicos que se consagran a la extensión del reino de Dios y a la salvación de las almas los podemos considerar como soldados de un numeroso ejército. Ese innumerable ejército le podemos dividir en dos frentes o grupos: retaguardia y vanguardia. El grupo de retaguardia son los que trabajan en el campo católico, cooperando de algún modo a las obras misionales por las oraciones, los sacrificios, la propaganda, la enseñan– za, las limosnas, las vocaciones, etc. El grupo de van– guardia se constituye por los soldados que trabajan en los campos de misión en las primeras líneas, para exten– der las posesiones del único Rey del universo mundo, Cristo Jesús, cuius regni non erit finis. Ese número inmenso de soldados de Cristo que se ocupan de la extensión de su reino está organizado de la siguiente manera: AI\TÍf:UL(l 1. 0 Organización, central canónico-misionera. Sumo Pnnlífice .... .... .. ...... .. Jefe Supremo de toda la Iglesia. a) Competmwia misionera directa . .... .... .... . ... .. S. C. de Propaganda Ficle.