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EL LIBRO DEL :\IISIONERO.---su ACTllACIÓN APOSTÓLICA 67 que la espiritualidad verdadera no consiste sólo en 1a parte negativa que tiende a suprimir la personalidad, renunciando a todo progreso. Es de carúctcr individua– lista. La espiritualidad evangélica es también negativa, pero tiene también elementos positivos indispensa– bles (3). 4. Espiritualidad con/llcicma.-Toda la moral se con– densa en la justicia que supera al egoís;mo, moderando las pasiones y sacrificando los propios intereses para elevarse a la perfección. A ósta se llega por la observan– cia del Li, que es el eonjunlo de todas las reglas morales, civiles, jurídicas y cererncmiales. Li significa ceremonia, e indica la norma de lo que uno debe hacer u omitir. Los deberes se distinguen en cinco clases de relaciones: entre el emperador y el súbdito, entre padres e hijos, entre hermanos, entre marido y mujer, entre amigos. El confucianismo distingue los hombres en rectos o per– fectos, en vulgares o imperfectos. Los primeros piensan en la honestidad, en las virtudes y en lm, leyes; los se– gundos, en la utilidad y en el lucro. Por tanto, la espi– ritualidad consiste en el amor a la justicia, y la mate– rialidad, en el apego a las ganancias materiales. Entre las cinco clases de deberes el principal, que compendia todos, es la piedad; porque el hijo que honra a los pa– dres Yivos y muertos cumple un ejercicio de justicia, elevándose de la bajeza de las pasiones a la esfera es– piritual de la perfección moral. La espiritualidad taoísta consiste más bien en la 1w– gación de los valores de las cosas materiales, en librarse (3) Cfr. EMIDIO n'Ascou, oh cit., p:{tgs. 40-60.