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EL LIBRO DEL MISIONERO.--su ACTUACIÓN APOSTÓLICA 47 car abiertamente el Evangelio como único código de verdad. Fué el método predicado por los Apóstoles, que obtuvo grandes resultados. El uso de este método puede encontrar muchas di– ficultades, según que sean los oyentes doctos o ignoran– tes, cultos o bárbaros. De este método se sirvieron San Francisco Javier en los pueblos de Pesquería, San Fran– cisco Solano e>nlre los indígenas del Perú, el Cardenal l\lassaia enlre los pueblos de Eaffa y Galla en Abisinia. El segundo no es otra cosa <Jue el 1rn'.·lodo apologt'.~lico, que demuestra la racionalidad de la doctrina cristiana fundada en los criterios de credibilidad o p1.·eúrnbulos de la fo. Este método es aplicable a los doctos y a los pueblos de cultura elevada. Se suele llamar también método in– directo cuando no se enseña directamente la religión cristiana. El misionero se contenta con las obras de en– señanza, <le cultura y de beneficiencia para ganarse pri– meramente la benevolencia de los infieles, porque <le otro modo serían inacccsihles. Una vez que el misionero se lrnya ganado la estima y el aprecio de los infieles, en tiempo oportuno, con gran prudencia podrá ir tra– tando de las verdades religiosas. No es conveniente alaca 1 • directamente los errores y falsedades de las otras religiones. Es preferible poner en claro la verdad, de tal modo que, por consecuencia, se den cuenta y se convenzan de sus errores. 4