BCCCAP00000000000000000000631
388 ESl'A:-d Y L\S i\IIS!ONES En esto consiste el Heal I\!lrunatu de India., que los Rey1·s de Espaúa ejercieron siempre con la mira p1wsta en la dilataci<'m de la Iglesia católica y en la comTrsi,\11 dl' lus indios (3). 540. Leyes de Indias.--Con ,,¡ doble fin de pnwt't'r a la rnlu– nización y evangelización de los países descubiertos, los Rey<'s de Espalla funun dictando Leyt's _\· Reaks C("·dula:-,, sPg1'rn J;1 o¡,nr-– tunidad lo requería. Estas Leyes y Ordenanzas fueron coleccionadas varias Yeces, pero la compilación oficial fut'· onfonadn por Felipe II y no se acabó basta 1618, en que se tnminó de imprimir con el título de Recopilación de las Leyes de I11clias, qtw se halla dividida en nueve libros y que CClllStituye el monunwnto mús grandioso de la acción misionera dt· Espafia en t:I :'\ue,,-o l\lundo. La legislación dt· Indias es altamente comprensiYa, sistemá– tica y humanitaria; la expresión mús alta del ideal Je ig-ualciad entre la población colonizadora y la colnnizada. «Los españoles --dice el P. CharlPs, S. J.- en tudas partes aparecrn como cons– tructores : iglesias, catedrales, monasterios, hospitales, palacios de los gobernadores, fuerlt'.S qu,· defiPndan todo estu. Ellos Ci't'an no mesas de cambio o factorías, sino ciudades pennancntes, tanto en él orden temporal como en ('[ t>spiritu,d. Su idPa, desde el principio, es la misma: adquirir toda !a r,·.~i1í11 purt1 la Igfrsiu católica. Filipinas y América Pspar'ínla demuestr;-rn q1w /ihtuYie– ron un resultado que nadie ha obtenido, í4). (3) Carlos V escribía a llernán CorteB en junio dP lfi2:i: «Yu 1,os eru·aruo· fí mando cuanto puedo ... qur con tudas 1'll('Stras jucr:::as, sopucsto,1.,· todos otros in– tereses y proverhos, trabaiéis por vuestra parte c1.u1nto r11 el 1n1-urdn 1,:0,<,· f1F rr posible, conio los indios naturalrs de e:,a "!v~uc1.,1a Es7wfta SC'an cun1:('rtúlos a nurstra Santa Jt'c CatóUca r industriarlos f ¡¡, dia para <¡?ff viuan t·omu cristianos 71 se salven». Carlos III, en Jtt.,al CPdula de 1-1 de agnstn dp l 7CH, drc!a: ~cnnsidt randn la iritportancia de q_ue rn niis rastos d0minins de las Inrl{as y ('U. el Asin se proporcione la proniulr,arión del Eranuclio y la Dilatm·ión dt· la Pe católica en m-uchas rr.oioncs en que sus habUadorcs -uirr•n, trn!arítL en in.fi <lelidnd ... 1nando se erijan Scminarlos de Jlisinnr:--; en esto,\' 'mis rchins ... >) F'ernando VII escribe al Virrey de 1\1:éjico: «Os tengo en .cwrrir,io curinto hace'ts JJtJr 1ni ¡ir rsnna: pcrn nada estimo en tanto como qur cuid{is rltl bien espiritual tlr' los indios que he puesto bajo vuestra protcceilJn !f ruidm:"0 ... 1>. Cfr. P. Lr:·t't~HIA, Las gr·andf'S J-h!lr:.s 1nisiona– les de Alejandro r11, en BirJliothe<'a Ilisparuz Jils>-'/(1llion. I, p;'ig. 200~:i:{ (4) Les Dossiers de l'action missionaírc, n. 67.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz