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CUARTA PARTE. -SEC. I. - CAP. III CAPITULO III EDAD ANTIGlí\. SEGUT\iDO PERIODO Edicto de Milán 1;; l:l1 - fornsÍtÍ11 de los lnírbliri» (.,i¡do V) 353 490. La Igle,ia en este período consolida sus posiciones en el Imperio Romano. Al mismo ticmpn que los ul,i,:p,,s y prcsl,ilerus S(' dl'dican a la con– \ ersi6n de los paganos en sus rt>Specti\·os territm·ios, los Santos Padres y <'scriton:s u:le,iústicos a:,ientan sobre H'llidas bases la teología católica, labor muy ner:ec,;¡; ia para combatir a los lwn•jps que pululan p(Jr todas parles durant,, esw [lPrÍodo. La labor mbiorn:ra dP la Igle•;i,i e-; de tal i•1U:nsidad, que cuando sobre.. \ lene la inv::-L-.,it"in tlí.: los húi b:1:-cs era ya cri"'tiano todo el Irnperio i{o1nanci. L:1 fo se extiPndc tamhitn C<,11 t'.•xito pur .\rnwr;ia, l\:rsia, Arabia y Etiopía. 491. Herejía~,.~ Las misimws, q1w rn t:1 primer período te– nían casi e::-:cl usi \·anwn te por ohj et o cnn n·rtir al cristianismo a los infieles, tuvieron que servir en gr::n parte, en este sr·gundo período, para Yolvcr al gremio de la y¡,rdadera Iglesia a llls hen'– j,,s, que, si bien no negaban a Cristo, admitían, sín t'mhargo, nrnrt'S fundanwntalPs acerca d1' los dogmas del cristianismo. Los herejes comenz;min a inft•:',tar la Iglesia ya desd!' los primerus siglos, pt'ro desdt: ,,1 siglo III, sohr,: todo, se multipli– caron lantu que apenas había ciudad o enmarca, así en Ori,·nte como en Occidcnti,, que no cstuYicra infestada de ellos. 492. Cambio de frente- En tales circunstancias, tu,:ieron los predicadores dr:l E\·angdio qUt: rc:dnhlar su celo v cambiar algún tanto de túctica, pms ya no se trataba t'rnicamentc de instruir a paganos ignorantr•s, sino tami>it:n <k conv(•nn·r a herejes, gene– rnlmente Nuditos o, por lo nwnos, hien enterados dC' los dogmas dt·l cristianism() y qu<' prl'l,'rHlí:rn snstt'nerse en sus errores apo– vac!ns t'n ;;utilua;; lt'c1lógicas. Por t·stn, l1 1 s misiun, rns sencillos rie los siglos anterion·s hu– bienJ11 Je cnnvertir-;,• ,·n Apologist;1s y Doctoff's y 1'mplear al mismo tit·mpn la pahhra y l:1 pluma, ,·chanclo mano de l,1 elocuen– cia y d,• la ciencia. Por ¡·onsiguiente, conw rn1,-,1011Prns, y mi– sioneros insignes, d¡·Jwmos considerar a los s\p,ilo!J:istas como San Justino (W7), .\tenúgnras, Oríft<'.nes (h. 185-254), Tntulia– no (160-240), Lactancio (325), l\Iinucio f'{>lix y otros. 493. Los Santos Padres misioneros. --Los Santos Padres fueron también grandes mision,,ros y trabajaron con ardor infa- 23-M