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zos del siglo V. La actividad misionera de la .fglesia se desarro– lla principalmente en el mundo greco-romano. Art. 1.-PRIMER PERIODO: DESDE EL NACilUIENTO :DE JESUS HASTA EL EDICTO DE l\lILAN (313) 165. Jesucristo es el fundador de las misiones y el primer misionero enviado por el Eterno Padre para redimir y salvar al mundo. Para continuar su misión a través del tiempo y del espacio fundó la Iglesia, eligió a los Apóstoles y les mandó a predicar a toda criatura. Los Apóstoles, recibido el Espíritu Santo en el día de Pentecostés, empezaron a predicar y se ex– tendieron por el mundo conocido. A los doce se añadió, des– pués, San Pablo, convertido milagrosamente por Jesús y des– tinado a ser el Apóstol de las gentes. Siguieron luego los discí– pulos y los cooperadores qup ayudaban a los Apóstoles, y el cristianismo se extendió rápidamente. El Evangelio predicado por los misioneros fué el fermento que transformó aquella in– gente masa pagana en cristiana. El E.dicto de Milán, promulgado por el emperador Constan– tino en 313, concedió libertad civil a la Iglesia. Libre de las per– secuciones y de los lazos de la autoridad civil, celebró el primer Concilio Ecuménico de Nicea (325), monumento auténtico del fruto obtenido por los obreros evangélicos en los tres primeros siglos de la Iglesia. Art. 2.-SEGUNDO PERIODO: DESDE EL EDIC'rO DE 1\11- LAN (313) HASTA LA El\lIGRACION DE LOS PU!tr BLOS (siglo V). 166. La Iglesia consolida sus pos1c10nes en el Imperio Ro– mano. Los presbíteros y obispos se dedican a la conversión de los paganos en sus respectivos territorios. Los herejes., después del tercer siglo, se multiplicaron más en la Iglesia; pero Dios suscitó numerosos. y sabios Apologistas, Doctores y Santos Pa– dres, que lucharon contra el paganismo, la falsa filosofía Y la herejía. Con la predicación y con los escritos defendieron la fe y con– solidaron la Iglesia contra toda especie de adversarios. 67