BCCCAP00000000000000000000622
690 «ALVERNIA)) contigo, para que nunca me pueda más apartar de Ti?» (107). 2. 0 ¿Es asequible la contemplación infusa a todos?-La escuela mística dominicana respon– de afirmativamente. El alma que sinceramente la busca y se dispone, más tarde o más tempra– no, llegará a encontrar y poseer esta preciosa margarita. Todos podrían, si de veras y en la debida forma lo procurasen. La escuela carme– litana, en cambio, defiende que es una gracia y don especial de Dios que lo concede a quien quie– re, cuando quiere y como quiere. Si el hombre se prepara, se purifica y se dispone, Dios se la con– cederá; pero no es absolutamente cierto, pues, según algunos, no puede merecerse de condigno ni ::idquirir como de derecho (108). 3.º ¿Por qué existen pocos. contemplativos?– La razón por la cual existen en los estados de perfección pocos contemplativos, es porque hay pocos hombres mortificados, abnegados, virtuo– sos y de verdadera vida interior. Se encuentran pocos generosos, desprendidos de todo lo creado y con la perseverancia en el fervor de la vida de observancia y de oración. 4. 0 ¿Fueron contemplatfros todos los santos? Dejando a un lado los niños y los mártires, los confe:c:ores · y las vírgenes c¡ue por largo tiempo vivieron vida de perfección, ¿fueron contemplati– vos? No se puede responder con certeza, porque no se conoce bien la vida interior de todos; hay una variedad inmensa en el tenor de vida, en el caráctC'r, en los usos y costumbres. 5. 0 ¿Es necesaria la contemplación para la san– tidad?-Para la santidad verdadera son necesa– rias las virtudes practicadas en grado heroico, las cuales no se podrán obtener ni practicar sin la oración. Pero que esta oración sea ordinaria o extraordinaria, de un grado más o menos ele– vado, nada nos con,ta con certeza. 1'spirit1wl, c. 26, npud. 232.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz