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20 NOCIONES PRELIMINARES.-ORIGEN Y DES. DE LA MISIONOLOGÍA Hacia la mitad del siglo XIX volvió a reanimarse el espíritu misional y la literatura misionológica, de carácter más bien romántico, popular e his– tórico. Las publicaciones de las Cartas edificantes (72) y de los Anal.es de' la Fe (73), que tendían a edificar el pueblo cristiano y excitarlo a la coopera– ción del apostolado, forman una gran parte de la literatura popular sobre las misiones. Se ofrecen filones de precioso material, pero se descuida el lado científico. Entre las publicaciones de orden histórico son notables el Barón de Hen– rion, Histoire générale des missions catholiques depuis le XIIIº siecle jusqu'd. nos jours, Paris, 1844-1847; H. Hahn, Geschichte der katholischen Missionen seit Jesus Christus bis auf die neueste Zeit, Kéiln, 1857-1863; Patrizius Wittmann, Die Herrlichkeit der Kirche in ihren Missionen seit der Glaubens– spaltung. Eine allgemeine Geschichte der katholischen Missicmen in den letzten drei, Jahrhunderten, Augsburg, 1841; T. W. M. Marshall, Christian Missions. Their Agents, Their Methods and Their Results, London, 1862. Este movimiento siguió desarrollándose sobre todo en las Ordenes, Insti– tutos religiosos y Sociedades misioneras, que se dedicaron a rehacer su his– toria misional, recogiendo preciosos materiales y documentos que encerraban en sus archivos y bibliotecas. Recordamos, por ejemplo, Monumenta histo– rica S. J., Matriti, 1894 y sigs.; las monografías de Ad. Launay, S. P., His– toire générale de la Société des Missions Etrangeres, Paris, 1894; Histoire des Missions de l'Inde, Paris, 1898; La Société cLes Missions Etrangeres, Paris, 1916; Histoire de la Mission de Siam, Paris, 1920; Histoire de la Mission de Cochinchine, Paris, 1923-25; Histoire de la Mission de Tongking, Paris, 1927. Otras Ordenes empezaron a publicar sus revistas oficiales, en las cuales aparecen con frecuencia relaciones y documentos concernientes a las pro– pias misiones; tales son, por ejemplo, Acta Ordinis Minorum, 1882 y sigs.; Analecta Ordinis Min. Capuccinorum, 1884 y sigs.; Analecta Ordinis Praedi– catorum, 1892 y sigs.; Etudes Carmélitaines, 1911 y sigs., etc., etc. Mas esta literatura es todavía fragmentaria, refiriéndose con preferencia a la Histo– ria (74), y faltando aún mucho campo que recorrer para que la Misionolo– gía pueda considerarse como una ciencia separada y relativamente completa. En el siglo XX la literatura misional ha entrado en una fase de grande actividad, abarcando los múltiples aspectos de la Misionología. Se han pu– blicado importantes monografías acerca de la doctrina misional en la Bi– blia, en la Tradición, en el Dogma, en la Moral y en el Derecho. Innume– rables obras de propaganda misional y de cooperación a las misiones han visto la luz en estos últimos tiempos. Abundan también las publicaciones sobre la Bibliografía, la Historia, la Geografía, la Estadística misionales, y no faltan algunas importantes sobre la Etnología y las Religiones compa– radas. No hay rama de la Misionología que, con mayor o menor profundi– dad, no se haya estudiado en lo que llevamos de siglo. No aducimos aquí los autores, porque en el decurso del libro los iremos citando oportunamente en la bibliografía particular de cada cuestión. Si a todo esto añadimos las numerosas revistas que en las principales lenguas se publican sobre asuntos misionales, nos podremos formar una idea del gran movimiento misional moderno en el orden literario (7'5). No obs- (72) Choix des Lettres Edifiantes... Paris, 1824. Cfr. R. STREIT, Biblioth. Miss., t. I, pp. 573-577, Münster, 19Hi. (73) Annales de l'Association de la Propagation de la Foi, Lyon, 1724. Cfr. R. STREIT, Biblioth. Miss., t. I, ¡p. 571. (74) Cfr. TRAGELLA, Avvíamcnto..., pp. 25-26. (75) Cfr. B. ARENS, S. J., Handbuch der lwth. Miss., p_p. 340-342, Freíburg, 1925.