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120 P. I.-MISIONOLOGÍA DOCTRINAL Pastorum ac praecipue unius Christi in terris vicarii Romani Pon– tificis ( 40). El Legado Divino, Fundador de la Iglesia, continuará su obra redentora por medio de su Esposa dilectísima, única heredera de su mandato y de su herencia. Para distinguir la verdadera Iglesia de Cristo de todas las demás que falsamente se arrogan este nom– bre, existen muchas notas o señales evidentes. Unos teólogos ponen más, otros menos ; pero sin dificultad pueden reducirse a las cua– tro principales del símbolo: Credo in unam, sanctam, catholicam et apostolicam Ecclesiam, las cuales exclusivamente se encuentran en la Iglesia Católico-Romana (41). Como de todas ellas se trata largamente en los Manuales de Dogmática, no nos detenemos aquí a demostrarlas; solamente hablaremos brevemente de la unidad y catolicidad, por estar más relacionadas con los problemas misio– nales. ARTICULO V DE LA UNIDAD DE LA IGLESIA 147. Bibliografía.-Todos los libros de Dogmática suelen tratar de esta cuestión. Son particularmente recomendables las siguientes obras: C. AL– GERMISSEN: La Chiesa e le Chiese, Brescia, 1942.-M. J. CoNGAR, O. P.: Chrétiens désunis. Príncipes d'un «Oecuménisme» catholique, Paris, 1937.– L. DUCHESNE: Antinomies ecclésiastiques. Eglises séparées, Paris, 1905.– S. HURTEVENT: L'1mité de l'Eglise du Christ, Paris, 1930.-Incontro ai Fra– telli separati di Oriente, Roma, 1945. Versión española, Oriente Cristiano, Madrid, 1947.-P. MANNA: I FrateHi separati e noi, Roma, 1942.-G. Rrc– CIOTTI, Roma cattolica e Oriente cristiano, Firenze, 1935.-C. Rurz IZQUIER– DO: La Iglesia y las Iglesias. Por el Ecumenism.o hacia el Catolicismo ... (opúsc.), Burgos, 1948. 148. La unidad de la Iglesia se puede considerar bajo diver– sos aspectos: 1) Unidad interna, como cuerpo místico de Cristo, cuyo principio es el Espíritu del mismo Cristo vivificante; 2) Uni– dad externa, como sociedad visible, cuyo principio es el minis– terio apostólico. Esta unidad externa es múltiple: a) Unidad de fe (simbólica), en cuanto todos los miembros de la Iglesia con- (40) Controv., t. II, lib. 3, c. 2, p. 75, Neapoli, 1857. El P. A. STRAUS, S. J., después de su denso tratado de Eoclesia Christi, como conclusión .pone la definición real de Ja Iglesia, diciendo: Ecc!esia est societas, in qua sola •lwmines, potentia quidem omnes, conjuncti professione fidei christianae et communione sacrorum a Christo institutorum sub regimine infa!tibili Vicarii Summi pro Christo, Pontificis Romani, et Episcoporum ei adhaerentium ad sanc– titatem ve! salutem aeternam supernaturalem, ideoque gloriam Dei tendunt. Cfr. De Eccl. Ohristi, ,vol. II, n. 1488, p. 910. Oeniponte, 1912. (41) Cfr. PEsCH, o. c., t. I, n. 400, pp, 287 y sigs.
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