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rn6 CARTAS DEL BEATO DIEGO JOSÉ DE CÁDIZ esto no tengo la vergüenza que para la otra tramoya de mi soberbia y loca fantasía. Anoche, en la oración de comunidad, estando con mi habitual di– sipación y distracción, me ocurrió á la imaginación una fuente sobre la faz de la tierra y no hundida en ella, cercada como de un brocal de pozo, abierto por un lado y también murado para que corriese por allí el agua que manaba. Esta ~ra poca, aun muy limpia y cristalina, no hacía poza, ni rebalsa en la fuente, sino que toda saHa á regar, no sé qué campo ó huerto de que nada conocí. La fuente estaba ocupada toda de piedras y de tierra, y de entre ésta y aquéllas manaba por todas partes el agua. En esto entendí que mi alma era aquella fuente Jlen~ de la tierra y piedras de mis pecados y miserias, y que el agua era la doctrina que predico, que, como es de Dios, es pura; limpia y cristalina. Veo en esto lo nada que se estanca en la fuente este agua, y que en cesando de manar y de correr, la fuente quedará seca y tan abominable corno las que por su mucha tierra y pie– dras no pueden darnos agua. ¿Qué tal? ¿Dirás ahora que son demasiados mis temores? ¡Ah, qué cierto es que no me lo dirías si delante de Dios me conocieses! Pide por mí, hermano de mi alma, y enc:¡_rga á esa bendita criatura que lo haga _para que no abuse yo más de la paciencia de Dios ni me pierda. Dale mil gracias por la estampita, que conservo con sumo aprecio. Yo te las doy á ti por todo. No puedo más. Ayer empecé esta santa Novena 1 , y conc!uída, pasaré á Lucena por tres días, porque ya urge lo de Málaga. Soy tuyo de cora– zón: encomendémonos á Nuestro Señor, á quien ruego te me guarde mu'– chos años en su divino amor y gracia, como lo desea tu afectísimo her– mano y siervo en Nuestro Señor JesLlcristo, Fr. Diego José de Cádi:z.. Te agradezco en mi corazón los días de mi santo. J. M. J. Málaga 12 de Diciembre del 98. Amadísimo hermano de mi alma de mi mayor veneración: La tuya de 24 del pasado me fué de gran consuelo por diferentes motivos. Dios sea bendito y te pague la grande caridad con que me tratas. No sé cómo agra– decerte tanto. Mucho me animan y dilatan tus reflexiones, y cuanto me 1 Esta Novena fué á la Virgen de la Sierra. La empezó el 14 y la terminó el 22. Los croquis cofresponden á los números desde el 47 al 57 del Cuaderno r8 de Ideas panegíricas, pues el nú– mero 52 es de un panegírico á San José, predicado en la iglesia de Capuchinos. Según costumbre del Beato, no usó más que un tema: Erit ibi seniita et vía..., tomado del cap. XXV, v. 8. de Jsaías.

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