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- 82 - Previsión Son incontables las maravillas de una mone– dita gastada a tiempo y oportunamente. Un peni– que, en Inglaterra, da a un hombre de treinta y un años, si contrata abonarlo hasta los sesenta años, el derecho a una suma de cincuenta libras esterli– nas pagaderas a su muerte en cualquier tiempo que suceda, aunque ocurra durante la semana en que efectuó el seguro. Por un penique un joven o una joven de quince años puede asegurarse una canti– dad de cien libras esterlinas, continuando el pago del penique durante toda la vida: las cien libras se abonan cuando ocurre la muerte... ¿ Quién se habrá imaginado la importancia de una pequeñez tan de poco valor? ¡Cuántas monedas se gastan inútilmente todos los días, que pudieran fructificar de este modo bien administradas! Hay que prevenir lo futuro. Fero la economía no consiste en guardar siem– pre, sino también en gastar oportunamente. « Sé económico, mas no codicioso: da lo que debes a tu necesidad, a tu honra y a tu amigo. El hombre de bien, jamás niega el dinero en estos casos.» (Jorge Herbert.) La sociedad padece actualmente mucho más de despilfarro que de falta de dinero ... Corno general– mente no ocurre eso en las comunidades religiosas, de ahí su aspecto económico más sano ... Hagamos