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- 54 -,- Téngase en cuenta que a veces es fal(ar al $C– creto el dar a entender que lo guardamos. Un secreto sospechado, es un secreto medio revelado. Hay momentos críticos para el hombre cuando la cólera o el amor solicitan la revelación de una confidencia. Entonces será preciso llamar en ayuda del deber a toda la reflexión de la razón y a toda la fuerza de la voluntad. El conde ~alisbury que llegó a ser ministro de Carlos II de Inglaterra y luego su más peligroso ad– versario, al adherirse al partido parlamentario, dió una prueba elocuente de s11 grandeza. El Parla– mento acusó a Mr. Ilollis sobre unas negociaciones secretas con el Rey. Fué llamado a declarar el conde, que por el car– go ejercido, estaba enterado de todo. Sólo faltaba HI declaración para el (riunfo de los enemigos del Rey. Mas el conde declaró que no hablaría en tal ¿¡sunto porque no quería recurrir a esta vía infame para vengarse de sus ªdversarios ... Capítulo Xl. Valores humanos. - Perfiles éticos En la puíc(ica de la vida é1prcnde1ás rnás que en cien libros de filosofía y moral. Los libros, por hermosos y buenos que sean, no