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- 52- No digas: ,, como me trató le he de tratar.:.... Si tu enemigo tiene hambre dale de comer, si tiene sed, dale de beber. (I) Véngate con beneficios que es la venganza de los hijos de Dios. Adelántate a ofrecer el pan del cariño a quien ves, de algún modo, enemistado ... A veces ocurre enemistarse por diferencias en mantener los derechos de la religión. El primer bien de la religión es la paz ... Es el bien e8encial; los demás, por grandes que parez– can, son accesorios. Dulce venganza El perdón, es la venganza de los dioses. En cambio es de élnimos pequeños el placer de la venganza. < 2 > César, después de la guerra civil, perdonó a tocios sus enemigos y se afligió porque Catón, ciándose la muerte, le había quitado la gloria ele perdonarle. Practiquemos la bella máxima del Rey ele Mace– donia Filipo, ele convertir en amigos a los enemi– gos, por medio de ber:eficios... Esta es !a dulce venganza. El Príncipe palatino Lorenzo manifettaba su ad– miración al Emperador Segismundo, porque en (l) Si esuricrit iuimicus luus cilla illum, de. (Prov. 25.) (2) Jufirmi est animi exigiiique voluptas, 111tio. (Inv.)