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- 49 - r. 0 ((Que no sean sospechosos en la fe... y detes– ten todo error y malsana novedad.>> Coincide con las palabras de la Regla de que los Ministros examinen a los aspirantes sobre la fe católica y eclesiásticos sa– cramentos : Este examen cada vez es más necesario, porque cada vez se multiplican más los colegios laicos, en donde no es raro que se enseñe hasta el ateísmo, o, por lo menos, 1a indiferencia religiosa (r). 2.º ((Que gocen de buena fama.>> 3.º ((Que sean de voluntad decidida, y se entiende que vienen a la Orden con el único objeto de servir sinceramente a Dios.D 4.º ((Que no padezcan enfermedad grave, conta– giosa o incurable.>> (Vide, núm.º 35, 3.º) .5.º. ('Que los admitidos para coristas estén debi– damente instrt1ídos y aprobados en humanidades, se– gún la costt1mbre de los diversos países, y ofrezcan esperanza cierta de poder continuar luego frt1ctuosa– rnente los demás estudios.D Respecto a los Hermanos Legos, dicen nt1es,tras Ordenaciones Generales (2) : ((No sean recibidos los que no estén dotados de ordinaria inteligencia, ni los que tienen algún defecto corporal notable, aun cuando, por otra parte, sean piadosos y de intaclrn– bles costumbres.>> 6.º ((Que no pasen de treinta y cinco años, a me– nos que su admisión sirva de mucha edificación al pueblo.>> Si claramente no aparece esta condi-ción ,I> • • ·' precisase la dispensa del Padre General. 38. Es preciso que todos estos requisitos, que ex– plicados quedan, sean tenidos muy en cuenta para la acertada selección del personal, porque, como en repetidas ocasiones han dicho los Pontífices y la ex– periencia lo confirma, la excesiva facilidad en ::idmi- ( I) Buls, n. 65. (2) Orden, n. 1 . 4