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- 54 - , donde fué uno de los más aventajados E su vida reli- la observancia de la vida religiosa. giosa. Oonservóse sieo1pre con la misar opinión, porque cada día iba dando mi evidentes testimonios de su ajustada ,, da, con lo edificativo de su obrar, y ate diendo los padres de la provincia á q, este religioso aprovecharía mucho á religión siendo Prelado, pues instruir á sus súbditos en la ob3ervancia regul11 no sólo con palabrnf!, sino también C( obras, que es lo que constituye á un pr lado en el.ase de perfecto; lo nombra.n guardián de Moti il, para que su religi os y prudente proceder pudiese resisl v rechazar las fuertes contradiccion que se suscitaron para impedir la fu dación de aquel convento; y aunqrni verdad q1te sólo la divina providenc fué la que superó tan formidable ese llo, pues allí se vieron atropellarse ], milagros, no puede dudarse que se val su Magestad de él, como de causa E gunda para ello. (P. Cord. Cron. ( Cad. 101.) Concluídas ya las dependencias toda y estando en quieta y pacífica posesi( nuestra comunidad de aquel convent en que había estado de guardián dicl P. Fr. Antonio durante el tiempo d pleito, N. M. R. P, Fr. Gaspar de Se, lla, provincial que entonces era, ballá dose con las facultades de la Sagra< Congregación de propaganda fide, pa Su prelacia. enviar una misióu á Guinea, escrib earta circulará los conventos de la pr