BCCCAP00000000000000000000608

- 67 -- ~ S:-~S:-&S:-S.-&.&.:.S.-~&.S:-:..J ·. inocente, jamás pudieron sacarle más palabras, que las que .había dicho. Por Sigilo d~l Sier esto algunos creyeron que Dios se lo ha- vo de Dios. bía revelado, por los méritos suyos é in- . tercesión ·de N. S; P. S, Francisco, de quien era especialísimo devoto, ha.sta que después de su muerte se supo que el verdadero crirr:íinal se había confesa– do .con él, y le había rogado que traba– jase por librar de la muerte al inocente condenado. (Orón. pe Gra·n. 400.) El segundo caso es más admirable to– davía y resplandece. más en él la heróica virtud del varón santo, pues, para ha– cerlo Jesuscristo más semejante á sí, permitió que lo acus3ran falsamente y lo traicionaran y vendieran dos discípu, los suyos, que en esto se dieron á cono– cer legítimos descendientes de Judas Is-, . cariote. Esos desgraciados, si~ndo Pro– vincial de esta provincia N. R; P. Fray Francisco de Jerez, que era juntamente Definidor General, depusieron ante él una acusación formal, calumniando la virgii;ial pureza del siervo de Dios, y atribuyéndole un delito abominable con- . tra la castidad. No creyó N. Rmo. Padre Provincial que pudiese ser cierto, lo que le delataban; pero por no faltar á las obligaciones de Juez, como lo es un pre– lado mavor, llamó á: .SU celda al siervo de Dios: y dándole r,oticia de lo que con– tra él habían dicho, le dijo que se defen- diese, p_ara en _caso. de salir probada la, Es calumnia calumma castigar como lo merecían á do. los temerarios delincúéntes. Oyó el sier-

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz