BCCCAP00000000000000000000607

-121 - Así cumplió el siervo de Dios el año de su noviciado con grande aceptación su profesión. de todos los religiosos de la familia, y con la misma hizo su profesión en ma- nos de aquel varón ineigne que se llamó Padre Fray Juan de Villafranca; luego lo enviaron al convento de Granada, donde se había puesto noviciado, para que allí con el ejemplo de sus virtudes animase á los novicios á correr sin des- mayo el eomenzado camino de la reli- gión. Por aquel tiempo habían tomado el hábito muchos mancebos ilustres, la flor de Granada y Antequera, y á todos aprovechó mucho, así para la prosecu- sión en el noviciado, como para apren- der la :religiosidad y el ejercicio de las virtudes, la vida de Fray José y su mor- tificada y amable compafíía. Hallaron los Preh=,dos al siervo de Dios tan capaz, que sún no había cumplido tres afím, de hábito, cuando le encargaron que cuidase, ensefíase v doctrinase á los no- vicios, como ayud~nte del maestro, que lo era entonces el P. Guardián. En esta ocupacién se portó de tal modo, que dió á entender la gran capacidnd que tenía para ejercitar con rectitud ::1qnel minis- terio, qw2, en toda religión es importan- tfaimo, pues de la buena ó mala crianza de los novicios se E:igue el haber después burnos ó malos religiosos; y así, en el afio de Hi26, hecha ya la división entre esta Provincia y la de Castilla, quedan- 1;0 nombr:in do ésta constituida en Custodia, lo hicie- VICe-maeS t l'º, ron Maestro de novicios, teniendo solos 16