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CAPITULO XIV Empieza lo vido del Siervo de Dios Fr. Mortín de Sevilla L padre de este varon insigne fué un modesto comerciante, natural Su~padresy de la villa de Ol!ería, en el reino de Va- patria lencia, el cual. por acrecentar su comer– cio, se vino á vivir á Sevilla. Aquí casó con una señora su igual en calidad y ha– cienda, y de ella tuvo varios hijos, entre los cuales fué uno nuestro Fray Martín. Nació en el año 1573, y en el bautismo le p:lSieron el nombre de Vicente Pas– cual. Crióse desde sus primeros afios con mucha religiosidad, y desde entonces empezó á mostrar las naturales luces de un genio vivo, agudeza de entendimien– to y buena inclinación. Su padre, cono– ciendo que Sevilla era una Ciudad deli– ciosa, llena de todo lo que lisonjea los sentidos, muy apta para que los jóvénes se perviertan, si no tienen quien les va-. ya á la mano; y como él no podía vigi– larlo de coutínuo por las frecuentes sali– das á que le obligaban sus negocios, le pareció que su hijo no se criaría en ella Su crianza • • . . "d d a d sm 1ncurnr en la oc10s1 a , ma re e todos los vicios y madrasta de todas las virtudes; y por evitar este inconveniente