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- 36 -- -:S-:-~&.-:.S.-:S-:-&.-:.S.-:S-:-&.&.-:.S.~ bín, uno de los pueblos ae su reducida Diócesis. El Obis p º Era entonces Alcalá la Real sede epis- Abád. copal, cuyo Obispo llevaba el Título de Abad, y su jurisJicción se extendía sola– mente á los pueblos de Priego, Carca– buey y Castillo de Locubin. En este úl– timo punto se había edificado por aquel tiempo una ermita ó Iglesia fuera del pueblo, dedicada á la Purfoima Concep– ción de nuestra Se.flora; y esta la ofreció el Sr. Obispo á los dichos Padres, enca– reciéndoles ser muy á propósito para Convento, por lo que andaban muchas Religiones con deseo de tomarla; parti– cularmente los Trinitarios Descalzos; pero que estaba resuelto no darla á nin– guno, sino en caso de que nosotros no la quisiéramos admitir. Y para mostrar más su deseo de que fundásemos en su Obispado, r,fiadió: Tres lugares hay en mi Abadía capaces de poder fundar Vuestras Paternidades; y desde luego doy licencia para que funden en ellos, que son Alcalá, Priego, y el Castillo; y si la villa de Carrnbuey fuera capaz de poder fundar en ella, desde luego la die– ra; pero el pueblo que está más próxi– mo y dispuesto para la fundación es el Castillo. Hay en él un Caballero del há– bito de Calatrava, que se llama Ruiz Díaz de Mendoza, Regidor dtci Alcalá, que tiene su hacienda allí, y reside lo Rniz Diaz de más del tiempo en el lugar; es deudo J\Iendoza del P. Fr. Francisco, lo cual vale mucho para ganarle la voluntad; Vuestras Pa-

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