BCCCAP00000000000000000000606

- 109 -– ¡,-,.:S:,(S:-S:,.:.S,-S:,,S,-.:.S,.:S~.:S:~~ altísima virtud, ejercitada por el mismo hijo do Dios? No por esto diremos, que las nela8 ó sandalias so oponen á la santa pobreza, especialmente cuando estas son dles, despreciables, pobres y sin curiosidad alguna, porque nadie más pobre evangélico que los Santt>s Apóstoles, y á estos como consta del Obms vü-tu– Evangelio de Sun Marcos, les permitió dos. la Yl:agestad de Cristo nuestro bien que trajesen sandalias; pero tampoco pode· mc-s negar que el no traerlas sea mayor y 1rnis estrecha pobreza. Y por esto nues- tro Fray Martín siempre anduvo del to- do d2scalzo, dáudole á la sauta pobreza este obsequioso culto, á costa de muchas molestias, dolores y penalidades. Estas cinco excelentísimas virtudes tuvo el siervo de Dios Fray Martín por objeto de su descalcez, las cuales no se duda, que conseguiría con rigidez tan penosa.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz