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- 55 - ~~ Cap. 12. fol. 131, añadió un compendio de la vida del V. P. Fr. Francisco de Se- Equivociones villa· y en el Cap. 18. párrafo 14S. fol. de este Padre ' . en 1 as Oró- 211., hablando de su vemda á Andalu- f::.ªs genera cía dice: « Trntábase de la fundación de niiestro Con,;ento de Granada, y pareció á los Siiperiores que no podfan poner me- e dio más eficaz para conse_qttir sus inten– tos, que Fray Franeisco edificase con su predicación, y moviese los ánimos de aqiiella esclarecida ciudad. Admitió ( el P. Comisario) la fundación eon m1~cho consuelo: empezóse á erigir el convento, de cuya fábrica, y de los religosos que toma– ron de ella la posesión, quedó por Prelado con nombre de Presidente el Siervo de Dios, etc.,, Después, en el párrafo 149, relatando cierto accidente de los ojo:J de <1ue ado– leció en Granada, y lo tuvo cuarenta días en un contínuo martirio, añade: « De Granada pasó á Anteqiwra con el mismo .fin de que en esta ciudad hubiese convento de nuestra Orden, etc.» Esto que en parte es cierto, y en parte no, ha causado en los que lo leyeron sin tener más noticias, que las que estas cláusulas suministran, el error de creer, y aun con tenacidad afirmar, que el primerc, . que vino á solicitar la fundación del convento de Granada foé el venerable P. Fr. Francisco de Sevilla; que habien- . do fundado este, pasó á solicitar la fun- ~;~'l.on0o~~uvo- dación de Antequera, numer::ndo al de Granada, por primero, y al de Anteque– ra por segundo en línea de fundación.