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CAPITULO XIV Ultirnos años del Siervo .de Dios os últimos afi.os de su vida los pa– só el V. P. Francisco trabajando en la fundación de nuestra Provincia !~!~t~t. f~:. Capuchina de Andalucía. Ya dejamos dauiones. dicho en el capítulo VII de esta Cróni- ca, que en Junio de 1514 llegó áGra:nada nuestro venerable con otros religiosos, á posesionarse de la fundación iniciada allí por el P, Severo de Lucena, de la cual iba nombrado Presidente el Padre Francisco de Sevilla, que fué el p:-imer superior de dicho convento. Lleo-6 allí el Siervo de Dios con un Va de Presi- , o . dente á Gra- dolor tan fuerte en los OJOS que le tuvo nad1t. muchos días privado de poder ver la luz; pero restaurado algo, empezó á fre- cuentar el púlpito consiguiendo igual fruto que aplaus0, y fué el primer Ca- puchino, <1ue se vió ocupar los púlpitos de Granada, en cuya memoria quedó como vinculado á nuestro convento el púlpito de (3an Lázaro. Como el siervo de Dios se iba cada Renuncia por día debilitando más con la continuación enfermo. de una enfermedad que venía padecien - do largo tiempo, llegó á postrarse de 14

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