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VIII 1623, pues lo restante del mismo es una polémica pesadí– sima (aunque interesante), acerca de un libelo que otros reli– giosos publicaron entonces contra los nuestros, el cual libelo fué condenado y mandado recoger. Dudamos en un principio si este manuscrito formaría parte del libro in folio que es– cribió el P. Bernardino de Zafra por orden del M. R. P. Pro– vincial Fr. Antonio de Arahal, (según cuenta el P. Nicolás de Córdoba), ó si sería un fragmento de la crónica que em– pezó á escribir el P. Pablo de Granada, segundo cronista de la Provincia; pero al ver el entusiasmo con que en ella se habla de Granada y de los granadinos, nos inclinamos á creer que es de este último. Su estilo y lenguaje es el pom– poso, afectado, difuso y gongorino que estaba muy en boga en aquella época. Lo citamos así: Pab. de Gr. N.o... añadiendo lit., cuando lo copiamos al pié de la letra. El 3.o es el Floi-ielo anclalúz pensil,-vergel capuclzino ameno,-doncle en varios cuaclros ele veinte conventos han jlore– cüfo á Dios rm1chas fragantes ji.ores ele Varnnes virtuosos. Casos singulares, y portentosos procligios: ó Nueva Crónica ele esta Provincia ele Capuchinos de la Inmaculada Concepción de la V. M. N. Seí'íora, en los Reinos de Andalucía, escrita por el P. Fr. Isidoro de Sevilla, Predicador Capiwhino, y Cronista de la misma Provinác1. Este V. P. fué el tercer Cronista de la Provincia y su estilo es ampuloso y gerundiano hasta dejarlo de sobra, como lo prueba el título que antecede. Su crónica tiene dos libros; uno t•ata de las fundaciones de los conventos y otro de las Vidas de· religiosos insignes. El l,o no alcanza más que hasta la fundación del convento de Jerez en 1679, y nada dice de la fundación de Casare;,, á pe– sar de haberla conocido el autor, pneR él murió en 1750, y allí hubo residencia desde 1731, la cual se convirtió en con– vento formal en 17cJA. El segundo libro lo dejó aun más atrasado, pues sólo alcanza al año 16-17, en que murió el V. P. José de Antequera, con cuya vida, (no acabada de es– cribir) termina. Tiene los párrafos numerados y lo citamos así: V. P. Isid. de Sev. n.o... El 4. 0 es un manuscrito que trata de las misiones que