BCCCAP00000000000000000000601

-1;i:3- 1 cador brillantísimas estrellas ·qru~ llenaban la Igle– sia de luz y claridad, por cuyo motivo le pintan muchos arrojando rpor la boca una multitud' de es– trellas. Caminando por un extenso valle'de las Indias, se vió de pronto rodeado 4e una multitud ,éLe aves, ~,uyo finísimo phtmaje y peregrina hermosura de co– lores llenó de admiración a cuantos le acompaña– ban, aJumentand'o el asombro cuando vieron qu,e po– saban sobre la c1abeza y hombros del V. Siervo de Dios, dándo1e la bienvenida con armoniosos trinos y festivos gorjeos, hasta que, recibida su bendición, se. alejaron con grandes demostraciones de rego– cijo. Predicaba una '"ez con gran vehemencia sobre el Juicio final, y al demostrarles la terribilidad' de la conmirnaci6n que el Divino Juez dirigirá a los ,ré– probos füdendo «Discedite á me maledidi & n, hizo un esfu.er ,zo tal, que se le abrió en el pecho una profrunda y pmlongada llaga, la cual debía haberle causado, según los médicos, una muerte instantá- , nea, si no fuern por un prodigio del cielo. E11 los t,r,einta años que vivió le sirvió para purificar. su invicta padencia como el oro en el crisol, de ma– nera que a la corona de Apóstol bien :podrá jun– társele la aur,eola de mártir. Después de haber tmhajado en la viña del Señor con. el celo o.e los Apóstoles, y sufrido lo inclecible por amor a Jesucristo, hallándose en Monforte fué atacado de un penosísimo d'olor de gota, por lo cual, 1 conociendo se le :acercaba el término de su carrera 8

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz