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110 Lo portentoso del P. Esteban de Adoain permanecen en vosotros, pedid TODO lo que querais y se os dará». (Joan, XV, 7). «En verdad os digo que si túviéreis fe como un grano de mostaza, diríais a este monte: Vete más allá y se iría; y nada os será impo– sible». (Mat. XVII, 19). «A los que creyeren, les acom– pañarán estas señales: En mi nombre echarán los demo– nios, hablarán lenguas nuevas ..., si bebieren una pon– zoña, no les, dañará; pondrán las manos sobre los en– fermos y éstos recobrarán la salud». (Marc. XVI, 17-18). En estas páginas nos concretamos a narrar sucasos, tal como constan p.Jr testimonios fidedignos. Narrar sucesos no es prevenir el juicio de la Iglesia nuestra Madre. ; GRAVE AFECCION A LA GOLUMNA .VERTEBRAL. La convicción general de que el Padre Esteban era un taumaturgo, movió á los Superiores de Capuchinos a utilizar reliquias suyas para satisfacer la devoción de los fieles, que las solicitaban. Agotadas las que quedaron el día de su muerte,_se tomó el acuerdo de sacar otras de la sepultura del Sier– vo de, Dios. El día 2S de Abril de 1898, el Muy Rvdo. Padre Fran– cisco de Castro y el Muy Rvdo. P. Ambrosio de Valen– cina, oído el parecer de . los Superiores mayores, extra– jeron varias reliquias insignes, como se dijo en otra página. Pocos meses después, una de ellas era instrumento