BCCCAP00000000000000000000600

100 Lo portentoso del P. Esteban de Adoain Advirtióles el Misionero, que si despreciaban la mise– ricordia de Dios, muy pronto experimentarían su jus– ticia. Apenas traspusieron la frontera y llegaron al valle denominado _de Santiago, ambos cayeron muertos re– pentinamente. Acaeció esto en- Mayo· de 1858 (Cuader– no II, p. 102). Predicando misión nuestro Padre Esteban en Sagua de Tánamo (isla ~e Cuba) en Diciembre de 1851, uno de los hombres de vida más escandalosa, lejos de pen– sar eri su conversión, burlábase ·.públicamente 'del mi– sionero, procurando desacreditarlo. C~mpadecido el Siervo de Dios de la esp_iritual ruina de aquel obstinado, le exhortó a abandonar su mal ca– mino, anunciándole que se aproxim_1;ba la hora de com– parecer ante. el tribunal de Dios. No atendió el infeliz pecador a consejos tan serios. Pocos días más tarde se verificó el anuncio del .misio– nero. Trabajando aquel desgracié3:do en una huerta de su propiedad, se sintió acometido de un grave dolor. La mujer, cómplice de sus desórdenes, le aconsejó que se ac'2istase. Apenas entró en e l le~ho comenzó a dar gritos diciendo que se moría. S~ compañera fué . a bus– car un Sacerdote._Mas antes que llegara murió el o_bs– tinado pecador presa de rabiosa desesperación, quedan– do con ·la lengua fuera y completamente negra. Aquel espectáculo causó espant6 a los que lo contemplaron. (Apuntes hallados entre los Sermones manuscritos del - Siervo de Dios). ,