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-88- gran impresión en la gente de buena voluntad y de es– píritu sencillo. Pero no conmovió a los culpables. El castigo se cumplió. Antes de ausentarse los mi– sioneros, el director de aquella banda de Lucifer murió repentinamente sin sacramentos. Demás está el decir que todos se convencieron de que Dios estaba con los misioneros; y que el fruto de la misión fué copiosísimo. Como herida. por un ra.yo El día 11 de Mayo llegó el Padre Esteban al interior de la Provincia del Apure deteniéndose en el lugar que se denominaba El Palote. Muchos de los indios, aunque hacía unos treinta años que no habían visto un misionero desde que fueron expulsados o asesinados los Capuchinos que los evan– gelizaban, no obstante eran cristianos y conservaban sus creencias, aunque no las buenas costumbres. Cuando llevaba algunos meses entre ellos catequi– zándolos, moralizándolos, y reuniéndolos en pueblos, observó que algunos empeñábanse en vivir en torpe concubinato con grave injuria del Sacramento los que eran casados, o con grave escándalo los que eran solteros. Prohibió el Padre Esteban qu.e nadie prestase alber– gue a los concubinarios, amenaza'ndo con inmediato cas– tigo del Cielo a los que ampar"lsen a tales escandalosos.

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