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bargo, el principio de la pluriformidad, que comporta la adap– tación realista de la «vida» y del «apostolado» de los frailes a la diversidad de los tiempos y de los contextos, solamente es legítimo -según nuestro texto constitucional_.:._ teniendo en cuenta un objetivo y tres condiciones. El objetivo es el poder «observar en todas partes fielmen– te la Regla y las intenciones de San Francisco... ofreciendo así la libertad evangélica en el actuar, especialmente por lo que se refiere a la renovación de nuestra vida, a fin de que el espíritu no se extinga» 4 8 • Las condiciones, a valorar de una manera complementaria y global, son éstas: a) Unidad del mismo espí– ritu genuino: asegurando la identidad vocacional de fondo me– diante la experiencia común de los valores religiosos específi– cos de la Orden; b) Unidad de obediencia: realizándonos y actuando siempre en el ámbito de la fórmula característica de nuestra profesión según San Francisco: «prometer obediencia, vivir y caminar en obediencia... » 49 , y c) Unidad fraterna: salvan– do siempre, con absoluta coherencia, nuestra fisonomía espe– cífica de «hermanos», es decir, de consagrados que han de desarrollar la propia vocación según la dinámica de una autén– tica fraternidad evangélica; sería intrínsecamente absurda una pluriformidad destructiva de nuestra dimensión fraterna, nota característica prioritaria de nuestro ser franciscanos 50 • Así pues, utilizando sobre todo estos dos instrumentos prácticos -el discernimiento fraterno y la plurzformzdad- se podrá asegurar mejor nuestra fidelidad dinámica, creativa, his– tórica, es decir, nuestra fidelidad en el cambio que la vida extensione et concreta applicatione principii pluriformitatis in unitate, en Analecta OFMCap. 90 (1974) 304 ss. Constituciones de los Hermanos Menores Capuchinos (1982), 5, 4-5. 48 Constituciones de los Hermanos Menores Capuchinos (1982), 5, 4-5. 49 Cfr. Rnb, pról., 3 ss.; 1, 1; 2, 9 ss.; 5, 16 ss.; Rb 1, 1 ss.; 2, 11, 14; Test. 24 ss. · 5 ° Cfr. Constituciones de los Hermanos Menores Capuchinos (1982), 5, 5. Francisco Iglesias. Originalidad de San Francisco. Conferencia Ibérica de Capuchinos. Sevilla 1987, pp. 17 ss. 26
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