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calientes de flores de heno o de linaza, especialmente entre las frotaciones_; pero a estas cataplasmas debe preceder siempre la frotación fría de todo el cuerpo o, por lo menos, una ligera fricción sobre la parte dolorida. SARAMPION Enfermedad febril y contagiosa que al. principio se-\lani– fiesta por escalofríos, catarros y otras indisposiciones, a las cuales se agregan luego en la faringe y velo del paladar al gunas manchas encarnadas que anuncian la erupción de la piel, la que comenzando por la cara se extiende por todo el cuerpo en fonna:de manchitas rojas irregulares. Casi siempre se presenta de modo más o menos benigno; pero algunas veces suele traer también graves complica• ciones. Precauciones.-Como el sarampión es una enfermedad tan frecuente, sobre todo entre los niilos, será difícil evitar to– do peligro de infección. Por tanto, las madres pondrán todo el cuidado posible para que en su casa no entre tan pérfido huésped, o para que no se propague si es que ha logrado pe, netrar. La frotación diaria con agua fría es un gran preservativo contra el sarampión. Pero si a pesar de todo, este enemigo consigue entrar en el seno de la familia, se separa-rá inme– diatamente al enfermo del contacto de ~os demás niños; y no sólo él quedará desde luego sometido al tratamiento, sino que también todos los demás harán de cuatro a seis frotacio– nes seguidas con el intervalo de una hora, el primer dia. Después, bastará una frotación al levantarse y otra al aco8- tarse. 7 1 ;•atamiento. - Al niño enfermo de sarampión, se le hace primeramente una empaquetadura desde los pies hasta las ro" dillas o hasta la, cintura. Al mismo tiempo se le aplica en la garganta una compresa remojada en cocimiento de fiores de heno O' de linaza, que se podrá repetir cada hora. Como bebida, podrá tomar un té de limpia plata, hinojo,