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PROPEIJEUTlCA ESPIRITUAL el camino comenzado y ampliar los conocimientos ele las varias etapas del itinerario espiritual. 1. - IDEAS CLARAS. La Baronesa de Landirás aspiraba a fundar una Orden religiosa de vida mixta', que amalga– mara la tradicional vida contemplativa de las an– tiguas Ordenes monásticas femeninas con la acti– \'idad apostólica de las jóvenes congregaciones de Clérigos Regulares en la medida consentida a la mujer en el ámbito de la disciplina eclesiástica. En la súplica dirigida al cardenal de Sourdis ex– puso con sorprendente claridad y precisión este ideal jerarquizando el valor de cada una de sus partes. Las dos son necesarias para conseguir el fin propuesto, pero el primado corresponde a la Yida interior, a la cual se atribuye justamente el secreto del dinamismo fecundo de la actividad exterior. Es, según frase de la Fundadora, « como el brazo » que imprime movimiento y eleva a las 1 No es el caso de profundizar aquí su concepto, ni tampoco examinar detenidamente las relaciones entre sus clos componentes. La doctrina fundamental sigue siendo, a pesar de las contraversias más recientes sobre el par– tiet!lar, la expuesta magistralmente por S. Tomás, en Summa Tlzcol. II-II, p. 179-182. La visión buenaventuriana ha sido objeto ele algunas disertaciones ele Bernardo Ape– :-ribay, O.F.M.: La vida activa y contemplativa según S. B: wnaventura, en Verclacl y Vicia 2 (1944 ), p. 655-689; Prio– ridad entre la vita activa y contemplativa según S. Bue- 11ave11tztra, ibid. 5 (1947), p. 65-97 y la correspondiente bi– bliografía.

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