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LA ESCRITORA MÍSTICA II5 Págs. CAPÍTULO VJI.- La Inmaculada Conceprión de :Haría y su Yida santísima hasta la gncarnación del Verbo................................ 192 VIII.- Visión que demuestra cómo Jesucrislo, nues– tro Reelenlor, es aquel Dios ele amor, in– finito en alributos y perfecciones, ele quien se trata Pn el libro prinwro de este tomo. Tal es el plan desarrollado en este primer volumen de la Vida divina de Jesús. Pero como su Director de entonces, el Dr. Hospital Frago, había aiiadido al final de algunos capítulos frases encomiásticas de la doctrina y de la escritora, la M. Angeles rogó más tarde al P. Ma– riano que arrancara las hojas que las contenían, para librarla de la tentación de inutilizar todo lo escrito. Hízolo así el Padre, y gracias a esto se han conservado algunos fragmentos, que, sin embargo, apenas pueden dar idea de lo que era dicho libro. A pesar de los desahogos de su humildad, en virtud ele los cuales destruía lo que iba escribiendo, no podía desechar la idea ele escribir la Vida divina de Jesús, porque se sentía apremiada por el amor "a glorificarle de mil maneras, y una de ellas dándole a conocer al mundo'' (15-IV-1912). Cada vez veía más clara esta su vocación. Y en efecto, al entregar su Autobiografía, en mayo de 1913, a su Director, P. Mariano de Vega, éste le impuso el pre– cepto de escribirla. El día 8 de septiembre escribió "cuatro o cinco renglones nadá más en el capítulo I de la Vida divina, pero de tan mala gana que, a no temer incurrir en un pecado de desobediencia, no escribiera ni una letra" (8-IX-1913). Acaso fueron estas