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96 SOR MARÍA DE LOS ANGELES SORAZU nas 248-272. 4) Por último una parte del comentario al capítulo VIII, que había escrito a fines del año 1917 y principios del siguiente '' como fruto o consecuencia del croquis fecha 14 de julio de 1917, que le enviara el P. Mariano" (31-VII-1920). El texto puede verse en Exposición, págs. ro8-rr5. La razón, o una de las razones, por que inutilizó todo lo restante, fué porque pensaba "dibujar y explicar todo el libro'', como también por haber ya comentado algunos episodios en el tratado sobre la Vida espiritual '' según se cumplieron en mi alma el año 1912 y 1913 y en los ejercicios que hice en 1915 y a fines de 1917 y principios del siguiente" (4-VIII-1920); todo lo demás le pareció carecía de utilidad. Los episodios a que se refiere se hallan expuestos en la Vida espiritual, pá– ginas 205 y sigs. Plácenos copiar aquí el juicio que estos comenta– rios merecen al P. Nazario Pérez: "No a todos agrada– rán estos comentarios, escritos sólo para almas muy espirituales. Literariamente extrañan algo al gusto mo– derno, pero son muy semejantes a los que escribieron algunos Santos Padres y autores místicos, como verá quien los confronte con la Catcna aurea del P. Mar– tín del Río, con los Comentarios del V. P. La Puente, y sobre todo con los clásicos de Ghislerio, con quien conviene en muchas acomodaciones, aunque difiere mu– cho en otras. Por lo demás, en éste como en todos los escritos, admiran los conocimientos teológicos de la sencilla religiosa vascongada" (1). (1) Opúsculos 21.farianos, pág. 12. Primeramente se editaron todos estos fragmentos sobre el Cantar de los Cantares en La Vida

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