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V l"l1AlLE AL!IA1-'til, Bilbaó, 21 de noviembre de IQ54 A mi inolvidable sobrina Sor María ,Tosda Arregni: Paz v Bien. Al recibir esta esquela deseo que te halles hien de cuerpo y de ;ilma, junto con la santa Comunidad, Yo sigo con mis achaques, nada mejorado (bendito sea Dios). Doy gracias infinitas a Dios porque m,~ quiere purificar aquí. Mejor es que padezcamos aquí que en las ,orare'., llamas del pulgatorio. Pues bien, carísima en el Señor, por ;,provechar una coyuntura propicia por estar de paso uno de la Comunidad de Valladolid, me adelanto con anticipación para felici– tarte, y también a esa virtuosa Comunidad, las pn'Jximas Pascuas de Navidad, deseando que paséis santa y alegremente y pidiendo mucho ,il Divino Niño todo aquello que necesitemos para ser todos muy suyos, y si no es así vamos muy extraviados, como va la sociedad en su gran parte, al caos de toda maldad e iniquidad. Por eso urge, sin tregua y descanso, trabajar por ello, porque no nos domine la iniqui– dad, que bastante domina por desgracia. Hace poco estuvieron a YÍ– sitarme Sinforiana con su prima Rafaela y con su hijita, ele unos diecisiete años. Me dejaron una limosnita regular. Las dos primas, casi ricas, tienen mucha suerte : también han tenido percances, más bien los hijos. Nada menos que quinientos mil duros qne pertene– cían dt' derecho. La hist10ria es larga y por brevedad la omito. Otra segunda visita tln-e de mi hermana Agustina con sus dos hija,. !vlaría y Antonia, que YiYe en Navarra casada con un dibu·· jcmte: tiene tres hijos y e! sobrino, ingeniero, se llama Juan Antonio. Fs hi_;o ele Maríi1, de intachable conducta y apreciado por todos Fila· me dieron más pormenores ele la familia. Me di,ieron también que fo.1 Lcrmann I:rancisco hahía levantado una. hermosa casa en Tolosa aho– rrando de sus jornales clE. carpintero. Eso sí que es heroicidad. lTn jornalero levantando nna casa ele verdad. Creo que le ayudaron bas– tante los amos de la fábrica, pues le quieren con delirio por su fiel comportamiento. Su madre, gastiadita, esv"rando la llamada ele Dio~. como todos hemos de estar. El hijo mayor de tn hermana Josefa me dijeron que estaba de militar en Melilla. Pide mucho para que se ron-