BCCCAP00000000000000000000556

32 S!L1TE!~I0 DE Z0:1ITA., O. F. M. CAP~ un capítulo. El enfermo suplicó se le leyera el índice, y al llegar el P. Guardián al cap';tu;o que trata <cDe cómo el espíritu de comptm– ción infunde en el alma el amor a los sufrimientos», Fray José María :c1amó: -Padre. léam.· depacio ese capítulo. Su profunda humildad ha sido tamb=én la causa de que quedaran ,:in sent.ido unas palahras quP pronunció pocos día, antes de morir y que para nosotros tienen un valor incaku1ab1e. «Una noche-no, refi1cre el religio~o testigo de; hecho-le estaba yo velando y de pronto, como s; despertase de un snefío, diio: «No huho milagro, si acaso_. algo de revelación.» Al preguntarle yo qué ~oñaba, él, como quien descuhierto en algo r¡ne trata de ocultar, tP:' contestú rápidamente: ((Sí, sueños.>> ¿ ~Ju{· si,Q·uificado p11diero,1 tener esta" p:t\aí>ras, ¿ Tal vez recibió a· g-una gracia extraordinaria, ac-a.so un anticipo de1 día <lf'. sn m11erte? Su humildad h:i dejado para sif'mpre sin e;;:p1icación lo que nues– tra curiosidad hubiera querido conocer con certeza. Que Fray José 1\faría pudo tener una revf'lad(m ar-en:a del día de s11 muert1r: la fun– damentamos en do~ he,·ho,. Cierto día un religioso se atrevió a pre– guntarle: -Fray Jos{· }\faría. lo mejor ;;abe Vuestra Caridad cuándo se va a morir. La pregunta piadosamenfr indisc-reta del religioso no tuvo más cont.estación qt1.' el silencio Este silencio humilde tiene, sin ernhargo, gran valor para nosotros. Si realmente no tuvo revelación del día de su muerte, pudo contestar directamente con alguna frase como ésta: « Eso sólo Dios lo ,ahe, o la hora de la muerte 11,adie puede sa– lH:r1a.l> Por tant10. c' 1 mi~nF) hrcho {L guardar silencio sobre una cosa tan importante indica, a nue~trn modo de pensar, que el Sefíor le hab:a dado alguna sefüd de sn próxima muerte. Más e,~plícito aún :>l caso siguiente: E! 5 de octubre el hermano qne le asistía le dijo. -Fray José J\faría, mañana es primer sábado de mes. --Ah. sí-contestó sábado de Fátima Y ,-,:n dar importancia a su-; palahras, aifadirJ: -Para otro primer sábado ya no viviré.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz