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P. Eusebio Villanueva Otra vez llamada para Paradas-Urgencias a las 11 '20 de la noche. Una señora con trombosis. Sacramentaria y oraciones de intercesión. En la zona inmediata de espera-urgencias: un grupo de mamás con niños pequeños esperando y gente mayor... Una intensa actividad siempre por este sector. A las 11 '50 llamada a Paradas, ha fallecido la señora con trombosis. Oraciones responso con los familiares presentes... Ella ha entrado con prisas en la mañana de Dios. El es como el día: mueras, llores o nazcas, grites o mantengas la boca cerrada El siempre amanece. Su «tiempo» no está en nuestro tiempo. La buena señora se ha ausentado sin que se entere la tierra. El Padre la ha recogido en la precipitación de la noche y a sus 86 años para su casa común y sin empujar sollozos... En el despacho azota el viento llovido contra el ventanal. A ratos el silbido se queda sólo y se pierde como una larga y antigua herida del viento... En plena noche, a las 3'30 llamada para la 802-C. Fallece un señor. Le administro los sacramentos de enfermo. La familia me responde con fervor. Es un dolor contenido y ya esperado. Es una aceptación de descanso. Freud decía que el amor siempre es sobrevaloración. Así nos ven los que nos quieren. Pero así nos ve también el que nos ama sobre todas las cosas: el Padre Dios. Esta hora de las 3 de la madrugada, es una hora que a menudo se relaciona con la noche oscura del alma... Eso será para los que andamos a tientas por nuestros caminos interiores. Para este señor hermano, que nos ha dejado, es la hora de la luz, de la luz del Espíritu. De entrar en la claridad perpetua. Son las 6'30 de la mañana cuando llaman para la 713-B. Otra anciana que entra de completo y para siempre en el Reino. Se ha ido a recoger el regalo del Padre rostro ante rostro y mirada en la mirada y una inmensa sonrisa de encuentro esperado. Aquí ya sólo vivía el pasado. Ahora está en su presente, que es ella y Dios... ¡Descansa en paz, abuelita! Ya tienes tu verdadera nacionalidad. Los ritos debidos. ¡Ah, la muerte, el misterio de la muerte! Todas las criaturas viven de la muerte. Se nutren de la muerte de otros seres. Sólo la Resurrección se engendra en la propia muerte. Pero esto ya es obra del Padre. Son las 9 de la mañana y ya amaneció. El cielo se separa del abrazo con la tierra y esta queda saciada y fecundada. Es otro día... 198
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