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mente perdido, tratando modestamente de dar voz (forma), cau– ce de varias maneras, no sólo a lo visto y oldo, sino a lo compar– tido en medio de mi Pueblo y en la mano de mi Dios. Pues quien da la mano al pueblo, Dios le toma la otra y juntos se van los tres. 2. 0 El poeta debe ser justo: asumir la vida, definirla, glori- ficar(a y salvarla. De ahl le viene su viento y su fuerza, de ese "movimiento" interior, independientemente de sus ritmos musi– cales o galas externas poéticas ... Es ahl dentro donde mana la justicia. De lo contrario la poesía-ritmo podrá parecer brillante y tintineante; pero será unfuegofrío o un agua seca. Es un amor la justicia, que arde sin consumir... "LEVANTANDO ACTA" no es un juicio-escobazo al pasado, que se asume con un amor exigente y transformador, es una gloriosa apelación al futuro que llega con alegria de caireles, que se presienten sus bajidos, respirar ahl ya en medio del pueblo, desprendiéndose de una placenta inútil por superada, para un "nuevo hombre" en "nueva socie– dad". No es un "acta" de lo que pasó, sino de lo parido a nueva vida, de lo que ya "tartamudea" y "pernea" echando a andar. Tratando de ser quirúrgico con lo que hay que eliminar– abandonar residual, y amoroso, maternal, con lo que se debe alentar, acunar y criar. Ser justo. 3. 0 Y debe ser independiente, el poeta, de mecenazgos e intereses garbanceros. Es pura necesidad biológica de liberación comunitaria. Dejar libre el chon o interior; no del particular rin– cón del poeta, sino del vasto seno o alveo del Pueblo soterrado y acumulado, que encuentra vena a través del poeta. Ese caudal es lo importante y no el humilde manantial, que cumple honesta– mente un servicio aliviador. Por eso es imprescindible sentirse libre para abrir el cauce y recrear riberas en la ancha "geo– grafía" del Pueblo, sin importar tanto las formas poéticas, lógi– cas y estructuras "ingenieras" de los legisladores de la palabra y el ritmo. Sin miedo a las palabras ni a las personas, con amor. El "río" no es canal, sino naturaleza libre, independiente, donde el pueblo pueda abrevarse con su "agua" y en sus manos, en mar- cha, no con la tumbona pereza y a fauces abiertas de las fieras ... "LEVANTANDO ACTA" no es más que una ola más en el inmenso mar, que intenta ser fiel a su litoral, a su playa que es el pueblo. Arrojada en ese "mar", que la trae y lleva en su ritmo, que la satura de sus sales y la hincha con sus vientos y la huma– niza con sus voces navegantes... en busca de puerto o costa. Una 1. ª Parte: dura, exigente, contestadora y condenatoria. Porque el Capitalismo y los Socialismos totalitarios son basálti– cos, gigantes, poderosos y agresivos hasta la dominación. Y a estas alturas sociales se sabe con claridad y puntualmente qué es lo que no se quiere, qué es lo que hay que sustituir como bloque. La 2.ª Parte es un CANTO a lo que se desea, a lo que se espera, a 8